Nuestro tradicional mensaje de Bienvenida será por el tiempo de Navidad reemplazado, por éste, pues ya debemos empezar a preparar nuestro corazón.
La Iglesia, para comenzar el año litúrgico, celebra la llegada de Cristo con una gran fiesta a la cual llamamos Navidad. Esta fiesta es tan importante que la Iglesia, antes de celebrarla, prepara a sus hijos durante el período conocido como Adviento (latín: adventus Redemptoris, 'venida del Redentor')
Este periodo indica el espíritu de vigilia y preparación que todos debemos tener. Al igual que se prepara la casa para recibir a un invitado muy especial y celebrar su estadía con nosotros, durante los cuatro domingos que anteceden a la fiesta de Navidad, debemos preparar nuestra alma para recibir a Cristo y celebrar con Él su presencia entre nosotros.
En este tiempo es muy común que se nos vayan los días pensando: ¿Cómo vamos a celebrar la Noche Buena y el día de Navidad? ¿Con quien vamos a disfrutar estas fiestas? ¿Qué vamos a regalar?, sin embargo este ajetreo no tiene sentido si no consideramos que Cristo es el festejado y es a él a quien debemos acompañar en ese día. Cristo quiere que lo recibamos con alegría por lo que el período de Adviento nos sirve para prepararnos y adornar nuestro propio corazón con alegría, con perdón, con humildad y con caridad.
Comencemos entonces a adornar nuestro corazón y a impregnarnos de este espíritu de Navidad que ya nos está haciendo sentir diferentes, un espíritu que no tiene nada que ver con tiendas, mall y regalos costosos; más bien tiene que ver con prudencia y austeridad.
La Navidad es Gozo, ¡no estés triste y sonríe!
La Navidad es Paz, si tienes enemigos, ¡reconcíliate!
La Navidad es Encuentro, ¡busca a tus amigos y familiares lejanos!
La Navidad es Don, hay pobres, ¡ayúdalos!
La Navidad es Humildad, si hay soberbia, ¡sepúltala!
La Navidad es Justicia, si tienes compromisos, ¡cúmplelos!
La Navidad es Perdón ¡arrepiéntete!
La Navidad es Luz, si estás en tinieblas, ¡enciende tu lámpara!
La Navidad es Verdad, si hay errores, ¡reflexiona!
La Navidad es Amor, si tienes odio, ¡olvídalo!
La Navidad es Vida, respira hondo y emociónate ¡¡estás vivo!!
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