HAITÍ: SOLIDARIDAD, SIN DEMORA

Hace unos días publicamos un saludo especial a los jóvenes que se encuentran en misiones en los más diversos lugares de nuestro país y a los jóvenes y adultos que se encuentran en cursos de formación, con el sólo objetivo de servir. Este saludo y reconocimiento cobra un sentido especial luego de la catástrofe que afectó al pueblo de Haití. Una tragedia horrorosa que se suma a las muchas que ya vive ese pueblo. Son muchos los fallecidos dentro de los cuales se cuentan efectivos que se encontraban en misiones de paz y muchos voluntarios que escogieron ese país para servir a sus hermanos.

Dentro de los fallecidos se encuentra el arzobispo de Puerto Príncipe, monseñor Joseph Serge Miot, reconocido por su constante lucha en defensa de los derechos humanos, contra la corrupción y a favor de los pobres. Esta catástrofe nos evidencia una vez más el inmenso amor de quienes dan la vida por un hermano, muchos de los fallecidos pudieron escoger otras realidades, sin embargo, escogieron la más cruda y la más dolorosa, acompañar a los menos afortunados.

Ayer Monseñor Alejandro Goic nos hizo un llamamiento a elevar una oración de amor y misericordia por las familias que han perdido a un ser querido. Acojamos este llamado y recemos implorando de Dios consuelo y alivio en el sufrimiento de quienes han perdido a un ser querido, por quienes han perdido lo poco que tenían y por el descanso de un siervo suyo que murió cumpliendo la misión que él le había asignado.

Declaración Conferencia Episcopal de Chile

A medida que avanza el día, se comienzan a conocer las dramáticas consecuencias del terremoto de 7,3 grados Richter que afectó ayer al pueblo de Haití. Los testimonios y las imágenes que nos muestra la prensa internacional dan cuenta de la magnitud de esta tragedia que suma dolor a un país herido por la pobreza y la violencia.

Ante esta situación dramática, como Iglesia que peregrina en Chile elevamos una plegaria al Dios de amor y misericordia, para que consuele a las familias que lloran pérdidas en vidas humanas y para que suscite en la gran familia latinoamericana una creciente solidaridad en beneficio de este pueblo.

A todas las personas de buena voluntad que quieran hacer un aporte generoso a los damnificados haitianos a través de los canales solidarios de la Iglesia, ponemos a disposición la red de Caritas Chile a través de la cuenta corriente N.º 117-01 del Banco de Chile.

Para transferencias electrónicas se debe indicar Caritas Chile, RUT 70.020.800-1.

El fruto de esta actitud fraterna hacia el pueblo haitiano será hecho llegar en los próximos días a nuestra institución hermana en Puerto Príncipe.

† Alejandro Goic K.

Obispo de Rancagua
Presidente de la Conferencia Episcopal de Chile

† Manuel Camilo Vial R.
Obispo de Temuco
Presidente del Área Pastoral Social-Caritas de la CECh

Santiago, 13 de enero de 2010