El próximo Domingo 27 de Junio, Alexi Vergara y Michael Palma acompañarán a sus dirigidos a recibir el Sacramento de la Confirmación, uno de los tres sacramentos de iniciación cristiana, donde la misma palabra, Confirmación que significa afirmar o consolidar, nos dice mucho sobre estos jóvenes que han dicho Sí a Cristo. A pocos días de vivir un momento de gran alegría e importancia no sólo para los jóvenes, sus monitores y sus familias; sino para la Comunidad en pleno, hemos querido saber qué piensa uno de ellos, Alexi, sobre los jóvenes que ha formado en la Fe; sobre cuál será el camino que espera continuar con estos jóvenes ya confirmados y el sentimiento que acompaña estos días.
Debo reconocer un cariño personal con este entrevistado; por una parte, la gran amistad que tuve con su madre en mis años de comunidad en
“Ante todo, a vosotros, los jóvenes. Con san Pablo os digo: «Trabajad por vuestra perfección». Una invitación tan exigente supone en los destinatarios la capacidad de entusiasmo. ¿No es ésta una característica típica de vuestra edad? Por eso, os digo: ¡pensad en grande! ¡Tened la valentía de ser atrevidos! Con la ayuda de Dios, «trabajad por vuestra perfección». Dios tiene un proyecto de santidad para cada uno de vosotros”.
De las palabras de SS., entendemos que este joven va por el camino correcto. Es la juventud cuando deben abonarse cual tierra fértil con los buenos ejemplos para hacerlos propios, ahí cuando las fuerzas y el entusiasmo son las máximas directrices, y dejar los afanes inútiles atrás. Muchas personas jóvenes se ocupan de sus afanes de juventud y dejan para la adultez cuando, muchas veces, las fuerzas y la inteligencia fallan, la santidad.
Es de esperar que el trabajo de Alexi y Michael haya caído en tierra fértil para que el día de mañana estos nuevos confirmados descubran que el ideal de santidad está en cada ser humano, que cada uno de nosotros tenemos las capacidades y la fortaleza para ser santos, pero es un trabajo personal y permanente, serlo.
…..siento que recibí en mi confirmación, el ideal de ser santo
Por Begoña Valdenegro Aravena
Después de dos años y medio se crean lazos, afectos y sentimientos especiales ¿cómo vives la “separación” de este grupo, que además, tengo entendido, tiene la particularidad de ser el primer grupo del cual son monitores tu y Michael que recibe el sacramento de la Confirmación?
No es fácil. Todo ha sido muy bello, Dios nos ha regalado una linda experiencia y más que nada hemos intentado que todos seamos amigos. Por eso la separación suele traer dolor, pero una alegría de saber que ahora les toca caminar con Jesús sin nosotros de intermediarios. Además, para ambos ser animadores por primera vez fue complicado, pero algo aprendimos con el tiempo, que no tenemos que ser nosotros, sino Jesús quien los guíe.
Muchos jóvenes llegan a las comunidades buscando amigos, grupos donde sentirse acogidos, etc., esa es una realidad constante, sin embargo, cuando se decantan estos grupos quedan los que realmente llegan con una motivación específica ¿Por qué creen Uds. que a pesar de haber interés de los jóvenes confirmados en continuar participando de un grupo de iguales características, la Confirmación, en la mayoría de las comunidades, es un proceso que concluye cuando el joven recibe el Sacramento? ¿Por qué las comunidades no aprovechan a estos nuevos Cristianos o ungidos para continuar un proceso, tanto para aumentar las vocaciones sacerdotales, tan escasas, como para hacer mejores seres humanos?
Personalmente creo que es porque nos conformamos con poco. La mayoría de los chiquillos busca un sacramento, lo reciben y se van. Por eso es primordial la labor de los animadores, porque si en todo el tiempo que compartimos logramos mostrarles a Cristo ellos se quedarán, porque Cristo siempre está en
La sociedad actual nos presenta jóvenes propensos a reaccionar según las emociones, jóvenes que carecen notablemente de voluntad y espíritu de sacrificio, cuyas mentes tienen escasa sensibilidad humanística, jóvenes con una notable fragilidad afectiva, debido a la debilidad de la vida familiar, sin embargo, muchos de estos jóvenes logran una cercanía increíble con Cristo a través de estos grupos de Confirmación que si bien en dos años no logran entregar todo lo necesario en cuanto a conocimientos de la fe, sí logran ser una primera aproximación con jóvenes conflictivos que ven cambiar sus vidas cuando se relacionan con la iglesia. ¿Qué debiera hacer la iglesia o la comunidad con los jóvenes que se confirman, para que encuentren en el Sacramento de la Confirmación el inicio de un proceso y no la finalización de un proceso maravilloso?.
Creo que lo fundamental es
El Sacramento de la Confirmación nos une más íntimamente a la Iglesia y nos enriquece con la fortaleza especial del Espíritu Santo. De esta forma, nos comprometemos mucho más, como auténticos testigos de Cristo, a extender y defender la fe con nuestras palabras y nuestras obras. ¿Qué harán Uds. para que estos nuevos cristianos no se vayan de la Comunidad y engrosen la lista de jóvenes “creyentes” pero no “practicantes”?. Teniendo absoluta claridad que formar jóvenes es una tarea ingrata y muy difícil, y seguramente hay muchos aspectos de la vida cotidiana que se confrontan con esta actividad.
Nosotros les entregamos las herramientas, se las grabamos en su mente y en su corazón, las claves para ser felices en la vida: La oración, el Rosario, la Misa y los Sacramentos; ahora ellos deciden si ocuparlas, estaremos atentos, quedamos en vernos en Misa cada Sábado y cada Domingo, y compartir terminada
¿Cuál fue tu experiencia personal cuando recibiste el Sacramento de la Confirmación?¿Qué sentimientos experimentaste al ser ungido y qué importancia ha tenido la Confirmación en tu vida hasta el día de hoy?.
En el momento no sentí algo extraordinario, creo que no tenía conciencia de lo que recibía, pero sí existe un antes y un después de mi confirmación, dos Alexis distintos, y me quedo más con el de después de mi confirmación. "Dios actúa de modo muy misterioso" me decía un sacerdote muy querido de Quilicura, y así es. Él me ha regalado algo muy bello, unas ganas grandes de ser santo, pero en verdad cuesta sabiendo que soy muy orgulloso. Eso es lo que siento que recibí en mi confirmación, el ideal de ser santo
Qué les dirías a esos 20 jóvenes que el Domingo luego de vivir un gran momento, terminaron el retiro con una gran pena en el corazón?
Que nosotros no estaremos siempre, pero que si se toman de María y de Jesús, siempre estaremos unidos. Les entregamos todo lo que pudimos, y es poco. Cristo les quiere entregar más, aprovéchenlo, y caminemos juntos. Ya no hay diferencia entre nosotros, ya no hay animadores y aprendices, ahora todos somos aprendices. La pena esta en nuestro corazón, pero también la alegría, es hora de aprender a caminar. El primer paso ya lo dieron, vamos por el segundo después de su confirmación!!!!
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