20091120

¿QUE ES LO IMPORTANTE?

Hoy la Virgen María nos invita a descubrir qué es lo realmente importante, lo esencial, en medio de una vida que muchas veces nos confunde entregándonos y sugiriéndonos cosas materiales como el centro de nuestra lucha diaria. Busquemos internamente qué es aquello por lo que lo daría todo y lo más probable es que no sea lo que hasta ahora creíamos.

Viernes 20 de Noviembre de 2009

¿Qué es lo más importante?”

1. Motivación

Es una época de contradicciones la nuestra, porque si bien las personas hacen grandes esfuerzos en pro de algunas metas, sin embargo, se ha ido generando una cultura donde se tiende a buscar siempre lo fácil, a evitar el compromiso. Cierto, la vida es dura o muchos “se la hacen a sí mismos difícil”; pero, por otro lado, eso lleva a que no pocos busquen desesperadamente pasarlo bien como escape, para olvidarse, para “borrarse”. Pero, al despertar, sigue siendo cierto que la vida exige decidir, optar, sacrificar. ¿Estamos dispuestos?

2. Palabra de Dios

Estaba saliendo del camino, cuando se le acercó uno corriendo, se le arrodilló y le preguntó: Maestro insigne, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna? Jesús le contestó: ¿Por qué me llamas a mí insigne? Nadie es insigne más que uno, Dios. Ya sabes los mandamientos: No mates, no cometas adulterio, no robes, no des falso testimonio, no defraudes, sustenta a tu padre y a tu madre. Él declaró: Maestro, todo eso lo he cumplido desde joven. A esto, Jesús se le quedó mirando, le tomó cariño y le dijo: Una cosa te falta. Vete a vender lo que tienes y dáselo a los pobres, que Dios será tu riqueza; y, anda, sígueme a mí. A estas palabras, el otro frunció el seño y se marchó entristecido, pues tenía muchas posesiones”.

3. Oración

Esta hermosa oración, compuesta por Teresa de Calcuta, nos señala, en modo poético la respuesta a la pregunta planteada este día: ¿Qué es lo más importante?

Señor, cuando tenga hambre,

dame alguien que necesite comida;

Cuando tenga sed,

dame alguien que precise agua;

Cuando sienta frío,

dame alguien que necesite calor.

Cuando sufra,

dame alguien que necesita consuelo;

Cuando mi cruz parezca pesada,

déjame compartir la cruz del otro;

Cuando me vea pobre,

pon a mi lado algún necesitado.

Cuando no tenga tiempo,

dame alguien que precise de mis minutos;

Cuando sufra humillación,

dame ocasión para elogiar a alguien;

Cuando esté desanimado,

dame alguien para darle nuevos ánimos.

Cuando quiera que los otros me comprendan,

dame alguien que necesite de mi comprensión;

Cuando sienta necesidad de que cuiden de mí,

dame alguien a quien pueda atender;

Cuando piense en mí mismo,

vuelve mi atención hacia otra persona.

Haznos dignos, Señor,

de servir a nuestros hermanos;

Dales, a través de nuestras manos,

no sólo el pan de cada día,

también nuestro amor misericordioso,

imagen del tuyo.

4. Un momento con María

María sí que es una mujer que supo de sacrificios. En una época tremendamente machista, quedar embarazada y no de su esposo, sino de un prodigio divino, no era fácil de explicar. Huir desterrada porque quieren asesinar al hijo, tener por hijo a quien muchos murmuran, estar al pie de la cruz, viviendo una viudez que no era apreciada en su época… nos hablan de una gran mujer, marcada por el rigor. Para que ella nos enseñe la perseverancia, anclada en la fe en Dios, digamos “Dios te salve, María…”.

5. Vivieron su cariño a María

Ante la situación de pecado que vivía su madre, al estar conviviendo con un hombre, Laura Vicuña no tuvo problemas en ofrecer su propia vida, en vistas a que ella lograra arrepentirse, cambiara radicalmente su vida y volviera al Señor. “Mi vida por la suya” fue el lema que guió a Laura por varios de sus últimos cortos años, un hecho inexplicable, como no sea el amor que Dios había derramado en su corazón, gracias a la apertura de Laura. ¡Y tuvo éxito! Un ejemplo de vida extraordinario que nos inspira en medio de las contradicciones de la existencia diaria.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios